¡Hay que espabilarse! El verdadero precipicio del PPD: Una provocación para un diálogo con el sector soberanista y defensor de la justicia social del PPD

Por: Ángel R. Villarini Jusino

Considero que Gerardo “Toñito” Cruz tal vez representa, como muchos otros, aquellos que de buena fe siguen viendo en el PPD el instrumento para mejorar el país devolviéndolo a sus orígenes para hacer una “segunda transformación” del país, como reza su lema de campaña en el 2020. Me parece que no comprenden que desde hace décadas el PPD se lanzó al precipicio de la busconearía, y está en caída libre, casi a punto de estrellarse; pero de una busconearía que va muchos más allá del nombramiento de buscones. 

La verdadera caída y busconearía en el PPD

La busconearía a la que me refiero es la estructural e inscrita como visión de mundo y actitud mental que por las pasadas décadas orienta la toma de decisiones dentro de los sectores dominantes de ese partido. Tan lejana de aquella otra que en sus inicios se expresó cuando Luis Muñoz Marín declaró: 

Al triunfar el Partido en noviembre de 1940, la sensación era ya avasalladora de una revolución —revolución democrática, dentro de la ley y el orden; pero revolución efectiva en el sentido de descuaje de puntos de vista, variación dramática en la manera de ver las cosas, transferencia del poder no de unos partidos a otros, sino de ciertos intereses económicos y sus maquinarias políticas al pueblo mismo.”1

La busconearía que debemos analizar es la de un partido y un gobierno que, contrario a sus orígenes dejó de tener como prioridad:

  • La defensa de la soberanía que se esperaba obtener con un estado autónomo libre y asociado; hoy sustituida por la demagógica e ilusoria propuesta de un ELA culminado, que mantiene la cláusula territorial, y que no es posible dentro del orden constitucional norteamericano.
  • Un desarrollo económico que combinara el emprendimiento cooperativo, las empresas estatales y el capital privado, que “permitiera avanzar hacia la abolición del desempleo y al mismo tiempo elevar los niveles de vida de los ciudadanos con empleos a niveles más altos de salarios y jornales.”2 Desarrollo hoy transformado en enorme dependencia de los fondos federales, crisis fiscal, desempleo rampante, fuga de talentos y proceso de gentrificación. 
  • Un Estado y gobierno de bienestar, que garantizara el acceso sostenible de los servicios esenciales de agua, luz, vivienda, seguridad, educación y salud para todos y todas; hoy sustituidos por el estado de inseguridad, humillación y zozobra que significa tener que depender para ello de que lleguen o no unos fondos y ayudas federales.
  • La educación escolar y universitaria como pilar para el desarrollo pleno del país, la educación ciudadana, el elevar los niveles de vida y la preparación del liderato político, profesional y económico; hoy sustituido por procesos de privatización, intervencionismo político partidista y reducción drástica de fondos.
  • Implantar buen gobierno de verdaderos servidores públicos, éticos y capaces de una eficiente y efectiva administración del país, sustituidos hoy en muchos casos por eso que “Tonito” Cruz  llamó “buscones.”

Los dos rostros del PPD

El PPD es hoy, como ayer, un partido con dos rostros, por un lado, una vieja guardia que se aferra y defiende el estatus actual por diversidad de razones que van desde los que tienen una convicción de que es  lo que le conviene al país hasta aquellos otros que responden a grandes intereses, buscan perpetuar su control de  la maquinaria del partido, o son inversionistas, carreristas u oportunistas políticos.

Por otro lado, un sector que se expresa en su programa de gobierno que promete una segunda transformación para Puerto Rico que emule aquella primera de sus primeras décadas del PPD. Este es el rostro de los populares soberanistas, defensores de los plenos derechos humanos y la justicia social para todos y todas, representado hoy día, sobre todo, por un grupo de nuevas generaciones que dirigen organismos de base y que han logrado ser electos a diferentes cargos. 

Este sector de avanzada, ojalá que más temprano que tarde, debe reconocer, que el PPD no es lo que fue y, como nos deja ver la historia, cualquier intento de cambiarlo está abocado al fracaso. Los que no conocen los errores y fracasos del pasado están abocados a repetirlos. Cuál si no eso fue el resultado de:

  • La lucha que en la década de los 60 dio el Grupo de los 22, jóvenes de tendencia progresista y soberanista que intentó cambios en las posiciones de liderato y devolver al PPD a sus raíces. En aquel entonces, en lugar de aceptar la necesidad de cambio se optó, sin querer queriendo, por dividir el Partido y con ello dar el triunfo al PNP. 
  • “El Manifiesto de Aguas Buenas” en 1970, que anunciaba un giro “soberanista” prometiendo la culminación del ELA y que llevó a una renovación del liderato. Pero que luego, por voz de su gobernador Rafael Hernández Colón, declaraba en 1977 y defendió en la ONU en 1978  que: “el acuerdo concertado con los Estados Unidos de América, el pueblo del Estado Libre Asociado de Puerto Rico ha sido investido de atributos de la soberanía política, que identifican claramente el status de gobierno propio alcanzado por el pueblo de Puerto Rico como entidad política autónoma.”3
  • La “Revolución positiva” de Aníbal Acevedo Vilá, que en su programa de Gobierno declaraba “Vamos a encaminar una solución democrática al tema del estatus. Mi compromiso es encaminar esa solución democrática aquí para poder ir a Washington unidos a exigir una solución. A esta generación le corresponde resolver de una vez por todas este divisivo debate.  La ruta de la Asamblea Constitucional de Estatus a través del pueblo es la ruta del futuro. Resolver el estatus es nuestro deber. Te garantizo que lo vamos a hacer.”4
  • El compromiso de García Padilla como candidato a la gobernación en 2008 de convocar una asamblea constituyente (aunque no comprometida con el lenguaje que solicitaron unos 200 soberanistas de que solo se incluyeran fórmulas no territoriales y no colonialistas), tan pronto fuera electo, y que luego descartó bajo el pretexto de que el presidente de los EU ya había tomado acción.5

Los retos del MVC ante los soberanistas y defensores de la justicia social dentro y fuera del PPD

Desde luego que el Movimiento Victoria Ciudadana no es una alternativa que puedan considerar muchos populares, en especial para esos que hemos criticado. Pero sabemos que es grande el sector de populares que han ingresado, se muestran interesados o están abiertos a considerar al MVC como la opción política que mejor representa sus necesidades e ideales de soberanía, justicia social, respeto a la diversidad y los plenos derechos humanos a los que aspiran. Objetivamente, aunque aún no subjetivamente, este sector representan parte de esa gran alianza de pueblo, que por encima de diferencias en materia de preferencias de status aspira al llamado a una gran alianza de pueblo que hace nuestra “Agenda urgente” para trabajar integralmente en el rescate de nuestras instituciones públicas, la reconstrucción del país y su descolonización. 

Consideramos que el MVC tiene el reto y tarea de:

  • Identificar las personas que representan este sector, no meramente en el liderato, sino en cada comunidad o colectividad, e iniciar un acercamiento humilde, respetuoso, crítico, creativo y dialogante con ellos y ellas. 
  • Un acercamiento que reconozca que hubo y hay a todos los niveles del PPD líderes y miembros honestos que han hecho y hacen mucho por servir al país; que hago claro que mucho más es lo que tienen en común con el MVC que con su propio partido. 
  • Llevar frente al liderato legislativo y gubernamental del PPD una campaña de fiscalización, por un lado, positiva y propositiva, que apunte a que cumpla  con todos aquellas promesas de su programa de gobierno del 2020. Por otro lado, de denuncia y protesta cuando se nieguen a cumplir con lo prometido.
  • Cultivar con ese sector las relaciones de diálogo, entendimiento, apoyo, trabajo colaborativo y alianza, desde la legislatura nacional y las municipales hasta la membresía de comunidades y colectividades.

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1   Citado por Mario R. Cancel Sepúlveda en, “El PPD la revolución democrática”. Puerto Rico entre siglos. Historiografía y Cultura. Agosto 27, 2020. https://aquiestapr.com/el-ppd-la-revolucion-democratica/
2  Córdova Iturregui, Félix. “El cambio de ruta del PPD en 1945-47: sus consecuencias (II).” Momento crítico. 11 de oct de 2020.
3 Puerto Rico, una crisis histórica. México DF: Editorial Nuestro Tiempo, 1979. http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/se/20171201035206/Puerto_Rico.pdf
4 Partido Popular Democrático. Plan para un Puerto Rico Nuevo. https://issuu.com/coleccionpuertorriquena/docs/2004_ppd_programa_de_gobierno
5 “García Padilla descarta convocar asamblea constitucional de estatus.” Metro. Apr 14, 2013 https://www.metro.pr/pr/noticias/2013/04/14/garcia-padilla-descarta-convocar-asamblea-constitucional-estatus.html

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