Invitación a saborearnos las palabras

Hace unas semanas comencé  a estudiar nuevamente  el idioma portugués. Hacía más de 35 años que por primera vez tuve la alegría de estudiar mientras  cursaba mis estudios doctorales en UCLA. Tal vez porque tenía que aprender italiano a la vez, se me dificultó engancharme con más ahínco a este nuevo idioma tan cerca del nuestro, por ser lengua romance y haber sido gestado en la misma cuna, la península ibérica, que el nuestro. 

Regreso a él con la alegría de poder  primero, ejercitar mi memoria, gozarme el placer de comenzar a entender películas, literatura, artículos periodísticos y atesorar la idea de que alguna vez pueda visitar a mis amistades en Brasil o regresar a Coímbra, Lisboa  o Nazaré en Portugal. 

Siempre recuerdo cuando niña dominar la jeringonza con una velocidad sorprendente. Idioma secreto de aquella niñez y temprana juventud empleada para despistar a nuestros mayores. Me apena que hoy esa  niñez y juventud no haya heredado esas habilidades que ahora, viéndolo a distancia reforzaban nuestras destrezas cognitivas.  Chitu, chie, chires, chilis, chito, nos obligaban a separar palabras en silabas, a entender y a contestar lógicamente el mensaje de la otra persona. Además, era clave esencial de diferenciación entre grupos vecinales o académicos. 

Las  defunciones que podemos encontrar  de la palabra jeringonza difieren en su apreciación artística. La definición de jeringonza  en la RAE invisibiliza la experimentación  con la que llenábamos horas hablando de ese nuevo mundo que no entendíamos y tratábamos de aprehender con nuestro idioma secreto. “jerigonza. Del occit. gergons. 1. f. Lenguaje especial de algunos gremios. 2. f. Lenguaje de mal gusto, complicado y difícil de entender. 3. f. coloq. p. us. Acción extraña y ridícula. andar en jerigonzas. 1. loc. verb. coloq. Andar en rodeos o tergiversaciones maliciosas. Real Academia Española”. La que nos ofrece WIKIPEDIA capta ese juego infantil, “Jerigonza. La jerigonza, jeringonza o jeringozo es una variante lúdica del habla en la que se intercalan sílabas entre medio de una palabra en forma reiterada.” Es claro por mi experiencia, y de seguro de quienes hablábamos en jeringonza,  que optamos por el carácter lúdico de la misma. 

Invito a esos familiares a que le regalen a sus menores el don de la palabra, el don del idioma secreto, el don de jugar y saborear el idioma. Les invito a regresar  a la jeringonza.