Propuesta para objetivos electorales

Aunque el artículo es entera responsabilidad de su autor, con el mismo La Revista Ciudadana quiere promover el abrir entre nuestros lectores y lectoras un diálogo en torno al tema.


1. ¿Qué queremos lograr en las elecciones de 2024?

El MVC puede lograr el objetivo electoral que deseemos proponernos. Y es que el proyecto político que representa el MVC es uno de vanguardia y se distingue de las demás organizaciones políticas, ya sea por su capacidad de movilización u organizativa. Es por esto que el MVC debería buscar ocupar la mayorías de los escaños posibles en el 2024. Deberíamos ser de los primeros 2 lugares en la próxima elección general. Por último la alianza que parecería estar disponible es la no electoral. Una alianza de país con los diferentes gremios, sectores, agrupaciones que no necesariamente son políticas. Intuyo como ciudadano y miembro del MVC que el PIP parecería no ceder a su terrible impostura.

2. ¿Qué candidaturas debemos presentar en la papeleta?

Deberíamos adoptar la misma estrategia en las candidaturas por acumulación que se adoptaron en el 2020, o sea asegurar 2 senadores y 2 representantes por acumulación. En la candidatura de senadores por distrito debemos igualmente unir fuerzas y presentar un solo candidato o candidata por distrito para una mayor probabilidad de triunfo. En la cantidad de representantes por distrito se deberían presentar los 40 escaños. En la cantidad de alcaldías debemos enfocarnos en las alcaldías que necesitamos para no perder la franquicia electoral, o sea las 39 alcaldías con sus planchas, donde intuyo que en las alcaldías ubicadas en las costas tendremos más oportunidades de prevalecer que en el centro de la isla. Esto último responde a que el MVC se ha dejado sentir en las luchas ambientales en especial, los cuerpos de agua. En adicción los pueblos del centro suelen ser más conservadores y menos progresistas. A este último elemento se debe realizar un análisis mucho más exhaustivo para desarrollar una mejor estrategia. Por otro lado, con relación a las candidaturas de la Gobernación y Comisaría Residente el MVC debe presentar ambas, inclusive podemos establecer alianzas con personas que no militen en el MVC pero estarían dispuestos a afiliarse y respaldar la agenda urgente. Para la gobernación personas como Pedro Cardona Roig (Gobernador), Ingrid Vila (Comisaría Residente o Gobernadora), Cox Alomar (Comisaría Residente), José Bernardo ( Comisaría residente). Entre otros, serían excelentes recursos para dichas candidaturas.

3. ¿Composición o estructura de esas candidaturas?El enfoque que deberíamos tener como mencioné anteriormente deben ser pueblos en la costa de Puerto Rico ya que la probabilidad es que sean de los más progresistas en el país. Con relación a las candidaturas lo único que los candidatos deben tener son 3 características o cualidades: Que los mismos sean Capaces, Comprometidos (con el país y la agenda urgente) y sobre todo que tengan la voluntad. En el 2024 necesitamos la voluntad como primera virtud. A veces nos enfocamos en las «mejores mentes» o candidatos caudillistas para atraer el voto. En esta elección la voluntad será lo decisivo. Voluntad para aprobar proyectos de ley que tengan como principal objetivo al país, Voluntad para enfrentar a la JCF para detener las medidas de austeridad que buscaran aplastar a las familias puertorriqueñas y que el candidato o candidata esté dispuesto o dispuesta a privarse de la libertad por estar del lado del pueblo. Voluntad para apresar a los responsables de la debacle económica del país y para juzgar a los que cometieron crímenes ambientales. Al igual que estén dispuestos apresar y responsabilizar a los que cometieron actos de corrupción y borrar la maldición del exgobernador Alejandro García Padilla al mencionar cuando ganó las elecciones en el 2012 que «no iba a mirar para atrás», eso nos ha costado muchísimo. Por último, concurro a su vez que el candidato o candidata debe comprometerse con la diplomacia y buscar puntos de concertación así sea mediante de las coautorías en proyectos legislativos ante una gran posibilidad de una legislatura pluralista, la mediación debe ser el instrumento por excelencia para dar paso a una buena negociación.

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