Camino a la soberanía alimentaria y la Alianza País

Por: Nelson Álvarez Febles1

En mi libro Sembramos a tres partes: los surcos de la agroecología y la soberanía alimentaria (Ed. Callejón, p. 268, 2016), termino, tras largas argumentaciones sustentadas en evidencia, con la siguiente declaración: 

Los argumentos presentados […] permiten aspirar a una sustentabilidad económica, ecológica y social y a la producción de alimentos para Puerto Rico. Una seguridad alimentaria camino de la soberanía alimentaria. Estamos convencidos de que es posible, hace falta voluntad política. 

Voluntad política que se traduzca en cambios en el ordenamiento legal que rige los temas agroalimentarios en nuestro país: estrategias agronómicas, educativas a todos los niveles, agro-comerciales, alimentarios, ecológicas, control del territorio y suelos agrícolas, comunitarios, entre otros. Esos nuevos ordenamientos legales deberán servir para (re)orientar todas las estructuras y agencias que tratan con el tema agro-alimentario a nivel isla, especialmente en el triple sistema que rige el hacer agrícola: Departamento de Agricultura, Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, Extensión Agrícola. Además incluimos el USDA, del departamento de agricultura federal.

Necesitamos de la ciudadanía, de estructuras, de políticas y servicios dirigidos a dos objetivos que entendemos prioritarios para acercarnos a una verdadera política agraria que nos lleve a la seguridad alimentaria a mediano y largo plazo. En primer lugar, nuestra agricultura y políticas deben de estar prioritariamente dirigidas a proveer alimentos de calidad, en cantidades suficientes, a la población puertorriqueña y demás habitantes de nuestro país. En segundo lugar, no existirá una verdadera soberanía alimentaria mientras tengamos unas prácticas y políticas agrarias marcadas por la miopía de los plazos electorales, y que vayan en contra de la naturaleza y sus recursos no renovables: agua, aire, suelos, biodiversidad. Las políticas comerciales nacionales y de exportación también deberán cumplir con los objetivos anteriores. 

Cuando abogamos por una agricultura agroecológica es desde el convencimiento de que es la única opción estratégica en Puerto Rico, dadas las limitaciones territoriales, la responsabilidad intergeneracional, además del abuso y la fragilidad de nuestros ecosistemas tropicales. Existe evidencia científica y práctica en las regiones y países tropicales y subtropicales alrededor del planeta que sustentan lo anterior, entre ellos: Republica Dominicana, Cuba, Hawái, Costa Rica, Colombia, Filipinas y Tailandia.

Sin embargo, a pesar del apoyo en las elecciones del 2020 a partidos como el Movimiento Victoria Ciudadana y el Partido Independentista Puertorriqueño, y a candidaturas independientes progresistas, nos enfrentamos a todo un entramado político y sistema electoral amañado para impedir precisamente ese acceso necesario para llegar a gobernar las instituciones que permitan los cambios radicales (de raíz) que necesitamos. Apostamos por una visión y práctica integradas y diversificadas en políticas y gestión agroalimentaria, camino de una soberanía alimentaria para el país, que incluya entre otras cosas (Sembramos a tres partes, p. 254):

  • Producción nacional de insumos agrícolas: abonos vegetales (composta), preparados para control de plagas, entrenamiento y facilidades para el uso de yuntas de bueyes, materiales para semilleros, implementos y maquinaria menor, entre otros.
  • Investigación participativa, para que los técnicos y los/las agricultores trabajen en la identificación de necesidades, investigación y extensión de resultados. 
  • Integración de la enseñanza en agricultura ecológica en todos los niveles del sistema de educación (eco huertos escolares, caseros, comunitarios, universitarios). 
  • Capacitación de calidad teórico/práctica para toda persona  interesada. 
  • Acceso a la tierra para trabajarla y apoyo técnico a todos los niveles. 
  • Financiamiento y seguros apropiados para mujeres y hombres agricultores.
  • Educación nutricional nacional y políticas públicas para fomentar una dieta de calidad, basada mayormente en productos puertorriqueños. 
  • Desarrollo de mercadeo y marcas nacionales diferenciadas: frescas, nutritivas, al gusto local, calidad, etc. 
  • Sistemas nacionales de certificación y de control fitosanitario.

Nelson Álvarez: ¿Crees que es necesaria una alianza, junte, en Puerto Rico para gobernar? ¿Cómo la imaginas?

Daniela Rodríguez: Definitivamente pienso que la alianza es necesaria porque entiendo que es la única manera de romper con las divisiones partidistas que nos mantienen estancades. Ya hemos visto que el bipartidismo solo “ayuda” a una minoría. 

NA: ¿Por qué llegar al gobierno puede ayudar a la seguridad y soberanía alimentaria?

DR: Puerto Rico tiene como beneficio su pequeña cabida. Si desarrollamos planes a nivel nacional, los resultados se verían en muy poco tiempo, dado nuestro tamaño. Es necesario que el gobierno se ponga a la vanguardia de estos temas si queremos realmente llegar a la soberanía alimentaria. Ya hemos visto el llamado de las Naciones Unidas a crear planes nacionales pro-agroecológicos si queremos combatir el hambre. 

Daniela Rodríguez es madre, activista y líder en soberanía holística, vive en Aibonito. 

Estamos convencidos que una Alianza del País amplia que incluya partidos, candidatos independientes, sectores en pie de lucha como los ambientalistas, afro boricuas, la diáspora, culturales y comunitarios, diversidad religiosa y de género, puede ser el camino a la toma del poder político que nos permita comenzar a andar por la senda de una verdadera agricultura y sistema alimentario nacional, de calidad, ecológico, productivo y generador de bienestar para nuestras y nuestros agricultores y comunidades.

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1  El autor es ecólogo social, educador en agroecología y políticas para la sustentabilidad. Ha publicado los libros: El huerto casero: manual de agricultura orgánica (2008), La Tierra Viva: manual de agricultura ecológica (2010),y Sembramos a tres partes: los surcos de la agroecología y la soberanía alimentaria (2017). 

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