Nota Editorial: Número 15

El fin del bipartidismo es inevitable, la pregunta es cuándo y qué harán los que lo representan para retardarlo. Tenemos un gobernador (PNP) electo por menos del 17% de la ciudadanía apta para votar gracias a un código electoral que impusieron para ganar las elecciones y perpetuarse en el poder. Si hubiera ganado el PPD el resultado hubiera sido similar. Es una minoría que logran construir amarrando a los que quedan del corazón del rollo, los carreristas políticos que llenan las nóminas de las agencias gubernamentales y municipios, los contratistas con el gobierno y su empleomanía y los(as) que logran confundir con sus campañas de mentiras y “fake news”. 

Ahora, ante la amenaza de una posible alianza de entre los partidos de minoría que pueda acabar con el bipartidismo, el PNP y el PPD se confabulan para evitar su derrota en las elecciones del 2024. Con ello buscan seguir imponiéndonos el gobierno de minoría sobre la mayoría, por ende, antidemocrático, que rige en el país.  

Pero la realidad de la corrupción y la insensibilidad del bipartidismo ante la crisis estructural y multifactorial que vive el país, la mediocridad en la gestión gubernamental ante la misma, que todos los días destapan y denuncian diversos colectivos, comunicadores sociales e incluso los medios tradicionales, ya no pueden taparla. Nada más revelador para mostrar esta descomposición, esta política de muerte, que el crimen perpetrado contra nuestra naturaleza en la bahía de Jobos, como lo revela la foto que acompaña este editorial. 

La gran alianza de país que el MVC junto a otros partidos y movimientos políticos y sociales estamos construyendo es sobre todo un llamado a vencer esta politica de muerte, de destrucción de nuestra naturaleza, de abusos y feminicidios, de restar derechos adquiridos, de revivir e imponer ideas y prácticas ya superadas históricamente, de exclusión de las diversidades sexuales de familias desintegradas por una forzada emigración.  Es un llamado a una política en defensa de la vida plena de nuestra naturaleza y gente.

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